12/06/2019 |
![]() La energía solar tiene cada vez más demanda en nuestro país, debido a las ventajas que ofrece, tanto desde el punto de vista económico como desde el punto de vista medioambiental. Lo corroboran distintos organismos oficiales como la Agencia Internacional de Energía Renovable (IRENA). Según, IRENA, la capacidad instalada de energía renovable se incrementó en España un 20% en 2017 a causa del impulso de la energía fotovoltaica. La energía fotovoltaica cada vez se instala más en los hogares y en las empresas españolas. En las instalaciones de este tipo son clave las baterías solares. ¿Qué son las baterías solares? Las baterías solares son sistemas de almacenamiento de la energía proporcionada por el sol. Su principal utilidad es ofrecer energía, aunque no se den las condiciones climatologías adecuadas para la obtención de la energía del sol. La capacidad de almacenar energía de una batería depende de la velocidad de descarga de la misma. Es decir, cuanto más grande es el tiempo de descarga, más grande es la cantidad de energía que la batería solar genera. Existen distintos tipos de baterías solares (baterías monoblock, AGM, estacionarias, de electrolito gelificado o de litio) que te describimos, a continuación, para que tengas más información para escoger una u otra en tu próxima instalación. Baterías monoblock Las baterías monoblock son las baterías más sencillas que existen y están formadas por una única carcasa que contiene todos los componentes de la batería. Es similar a las que se pueden encontrar en los coches o en los camiones. Cuentan con una vida útil corta (unos 600 ciclos con descargas del 40%) y poca capacidad. Tienen utilidad en pequeñas instalaciones estáticas donde se priorice una buena relación calidad-precio. Baterías AGM Las baterías AGM tienen un tamaño menor que las baterías monoblock pero utilizan una malla de fibra de vidrio que permite contener el electrolito, aumentando la estabilidad y la durabilidad de la batería. Estas baterías usan menos ventilación y disfrutan de una vida útil mayor que la anterior tipología de baterías. Cuentan con una vida útil de 1.000 ciclos. Son apropiadas en situaciones con alta intensidad de descarga. Estas baterías son perfectas cuando se necesitan corrientes muy altas en poco tiempo, ya que su resistencia interna es baja. Baterías estacionarias Las características de las baterías estacionarias hacen de estas baterías la mejor opción para instalaciones con un consumo diario elevado y durante un periodo de tiempo amplio. Tienen una vida útil larga, superior a los 20 años y profundos ciclos de descarga diarios. Baterías de electrolito gelificado Este tipo de baterías también se llaman baterías de gel y son utilizadas en instalaciones de tamaño medio o grande con un funcionamiento intenso durante largos periodos de tiempo o en aquellas donde sea complicado realizar un mantenimiento. Cuentan con un funcionamiento cíclico de alta calidad. Estas baterías están compuestas por un gel que se forma a partir de la mezcla de Electrolito y con una Sílica amorfa. Baterías de Litio Con la aleación de LI-Fe disponible en las baterías de litio se puede descargar el 100% de su potencia. Esto quiere decir que una batería de litio de 200 Ah se puede cargar a ese nivel. En cambio en las AGM o las de Gel, esta potencia de carga se sitúa en un porcentaje menor, en el 10 o en el 20%. Esta mayor capacidad de descarga permite que el proceso de carga sea más rápido que en el resto de baterías. La vida útil de estas baterías es de 5000 o 6000 ciclos al 80% de descarga, debido al efecto memoria casi nulo que tiene el electrocito. Si estás interesado en baterías solares y necesitas más información, o quieres asesoramiento sobre cualquier tema relacionado con la energía solar, ¡puedes ponerte en contacto con nosotros sin compromiso! |